El riesgo de liquidez en finanzas es la posibilidad de sufrir pérdidas originadas por la dificultad, total o parcial, de realización de ventas o compras de activos, sin sufrir una modificación sensible de los precios. También se refiere a las pérdidas originadas por encontrar dificultades en la financiación necesaria para mantener el volumen de inversión deseado, por ausencia de ofertas o elevación de los tipos de interés.

Sin embargo, debemos tener en cuenta que existen otras acepciones económicas sobre el riesgo de liquidez. También se considera riesgo de liquidez a la posibilidad que existe de que un deudor no pueda hacer frente al pago de su deuda, a pesar de tener activos por encima del valor de la deuda.

Tipos de riesgo de liquidez

Para que entiendas exactamente en qué consiste cada una de las modalidades o conceptos del riesgo de liquidez vamos a explicarlas de forma sencilla. Seguro que así lo entenderás perfectamente, ya que son situaciones que se dan asiduamente.

Riesgo de liquidez de activos

¿Algunas vez has querido vender algo y no has podido porque nadie quería comprarlo? Pues esta en la clave del riesgo de liquidez en las inversiones. Ocurre a menudo en la Bolsa con algunos activos que menos se negocian, por lo que debes esperar a que alguien desee comprarlos. Otra posibilidad es que tu quieras venderlo a un precio y que nadie quiera comprarlo, pero si necesitas venderlo para conseguir dinero líquido es posible que tengas que reducir su precio, incluso por debajo de su valor de compra.

Aunque podamos pensar que esto solo ocurre en los mercados financieros, debes saber que no es así. Por ejemplo, pongamos el ejemplo de una casa que quieres vender. Es posible que el valor de tu casa sea de 150.000€ y quieras venderla para comprarte otra. Sin embargo, puede que nadie quiera comprar tu casa o que, las únicas ofertas que posean no superen los 115.000€. Pues el riesgo de liquidez de activos consiste en el riesgo que no puedas llegar a vender tu casa o de tener pérdidas al venderla por debajo de su valor.

Riesgo de liquidez de pasivos

¿Alguna vez no has podido pagar a alguien porque otra persona te debía dinero? En muchas ocasiones se puede escuchar esa frase tan famosa «es no tengo líquido». Pues eso es lo que se le suele decir a los acreedores cuando no se les puede pagar por falta de liquidez. Esta modalidad de riesgo de liquidez hace referencia a la posibilidad de un deudor no pueda hacer frente a sus deudas a pesar de tener activos que poseen un valor superior. También existe la posibilidad de que el deudor cumpla con sus pasivos a un precio inferior.

Esto puede ocurrir tanto a nivel empresarial como en la economía doméstica de las familias. Pero debemos tener en cuenta que el que tiene el riesgo de liquidez de pasivos es siempre el acreedor que presta el dinero o el agente económico que financia el pago.

Por ejemplo, existe este riesgo cuando una empresa tiene poco dinero líquido para pagar una deuda de un millón de euros, pero tiene un patrimonio de 7.000.000€. También es posible que una persona no pueda hacer frente al pago de su hipoteca de 200.000€ pero tenga propiedades por valor de más de 800.000€. Además, cuando se dificulta mucho el pago de la cantidades adeudadas y, además, las cantidades son muy grandes, el banco puede establecer una refinanciación de la deuda para poder recuperar el dinero. En estos casos el banco accede a reducir la deuda porque si no cobra lo que se le debe puede tener problemas. Ese dicho tan conocido que dice: «Si le debes un millón al banco, tú tienes un problema. Si le deben 100 millones al banco, el banco tiene un problema».

 

Pues en esto se basa el riesgo de liquidez. Al final se resume en la posibilidad de que pueda tener problemas económicos por lo falta de dinero líquido para invertir o para poder vender.