Clases de competencia

La competencia existente en un territorio concreto determinará el grado en el que las empresas deben dedicar sus esfuerzos para poder hacerse un hueco en el mercado y sacar provecho de los bienes o servicios que vende.

Es por ello que existen diferentes tipos de competencia. Dependiendo del mercado del que se trate, encontramos 2 tipos de competencia principalmente: la competencia perfecta y la imperfecta.

La competencia perfecta

A grandes rasgos podemos indicar que la competencia perfecta se da en un mercado cuando ninguna de las empresas que participan en él o incluso agentes externos (como los Estados) son capaces de influir en los precios. Sus características principales son:

  • El número de empresas competidoras es elevado.
  • Cada empresa puede vender la cantidad que quiera de los productos que comercializa.
  • Las empresas conocen el precio de los rivales y los compradores saben las ofertas de los productores.

Puesto que esto no se puede llevar a cabo por lo surrealista que se presenta, existe la competencia imperfecta.

La competencia imperfecta

La competencia imperfecta es la salida o la alternativa a la competencia perfecta. La competencia imperfecta se da cuando alguno de los agentes (ya sea el Estado o las empresas) tiene el control sobre los precios de los bienes y servicios en un sector de la industria o en un mercado concreto.

Puesto que esta situación es más realista, un mercado tiende a ser más de competencia imperfecta e intenta asemejarse a uno de competencia perfecta, cosa que, obviamente, es difícil de conseguir. Como se pueden dar diferentes escenarios, la competencia imperfecta se puede dividir en 3 grados diferentes:

Monopolio

La situación de monopolio es el grado más extremo de la competencia imperfecta. Ésta se da cuando en la industria o el mercado el único productor existente recae sobre una empresa en concreto. Dicha empresa tiene el poder absoluto sobre el manejo del precio, y por lo tanto tiene la potestad de cambiarlo como le apetezca.

Obviamente, para que esto pueda suceder no deben haber competidores que puedan ofrecer productos sustitutos por el que es ofertado por el monopolista.

Algunos servicios especiales (sobre todo de abastecimiento público) son controlados por una única empresa en un país. Son los conocidos como monopolios naturales, y suele recaer sobre una empresa el control o la totalidad del abastecimiento de dicho servicio (ej: agua, transporte, electricidad, …).

Oligopolio

El oligopolio se da cuando, a pesar de ser pocos, unos cuantos de competidores tienen influencia sobre el precio de productos. Ya no es una única empresa la que tiene el poder sobre una determinada industria o mercado, sino que existen más agentes que están compitiendo (eso sí: no muchos).

En general, estos líderes tienen gran influencia en los precios y, por tanto, las empresas que intentan acceder a competir contra ellos no pueden. Existe tan control que el oligopolio, si las empresas se organizan pueden a ejercer a modo de monopolio. Estas colusiones en algunos países están prohibidas.

Bienes diferenciados

Esto se da cuando las empresas que forman un oligopolio producen bienes diferenciados pero siguen manteniendo el control sobre los precios que habían acordado. Como hemos indicado anteriormente, este tipo de prácticas pueden estar prohibidas en algunos mercados o países por razones obvias: una pequeña empresa no puede entrar a competir ya que el oligopolio formado le eclipsa.

 

Aunque estos son los principales tipos de competencia imperfecta existen otros que también son muy comunes como lo son los monopsonios y los oligopsonios. Los primeros hacen referencia a un único comprador en un mercado de un determinado producto/servicio (puede ejercer el control de precios, ya que es el único que lo compra). Por su parte, el oligopsonio se da cuando existen pocos compradores de los bienes en el mercado que pueden influir sobre los precios.