La competencia imperfecta sucede cuando en un mercado los vendedores tienen capacidad de poder afectar sobre el precio de los productos o servicios de un determinado mercado. Su curva de demanda presenta pendiente negativa, ya que a medida que aumenta la cantidad, el precio del producto crecerá.

La competencia perfecta es el proceso contrario, y los vendedores no tienen poder para mover los precios, por lo que la curva de demanda es horizontal (cual sea la cantidad, el precio no varía).

Tipos de competencia imperfecta

No obstante, dentro de la competencia imperfecta podemos encontrar diferentes tipos de mercado que vendrán caracterizados por el número de oferentes que existan y el grado de diferenciación de los productos del mercado. Esto, a su vez condicionará el grado de control sobre el precio, dando lugar a diferentes tipos de competencia imperfecta:

  • MONOPOLIO

Es el caso más extremo y sucede cuando hay un único oferente que tiene el control total del mercado. Normalmente, no existen productos similares en el mercado, por lo que se encuentra solo y tiene libertad a la hora de establecer precios.

En la práctica, muchos países no permiten establecer monopolios. De hecho, España prohíbe los monopolios y las prácticas monopolísticas.

  • OLIGOPOLIO

Existen algunos oferentes que venden productos homogéneos o muy diferenciados, por lo que establecen un control sobre el precio reducido.

  • COMPETENCIA MONOPOLÍSTICA

Sucede cuando hay muchos oferentes pero los productos están diferenciados, por lo que las empresas siguen teniendo algo de control sobre el precio.

  • MONOPSONIO

Ocurre cuando solo existe un solo demandante, por lo que existe un control completo sobre el precio.