Hábitos de los inversores

Ser un inversor de éxito no es una tarea fácil: no es algo que se consigue de la noche a la mañana y mucho menos sin tener experiencia. La experiencia es, quizá, el apartado que más se debe trabajar para lograr cierta reputación o éxito.

No obstante, si quieres aprender a invertir vamos a comentarte algunos de los hábitos y de las características más comunes de los inversores de éxito. Solo aprendiendo de los mejores podrás llegar convertirte en un buen inversor.

¿Cuales son las características de los grandes inversores?

Entre las prácticas más comunes de los grandes inversores podemos encontrar:

  1. Conocer nuestras aspiraciones y objetivos. Principalmente, debemos conocernos a nosotros mismos y saber qué objetivos queremos lograr como inversor. Los objetivos que nos marquemos deberemos tenerlos claro para saber qué tipo de decisiones tomar con respecto a las inversiones que estamos realizando. Entre otros aspectos a vigilar dentro de nuestros objetivos se plantea la oportunidad o no de participar en inversiones de alto o bajo riesgo. Esto vendrá determinado por la aversión que tenga al mismo, así como de la seguridad que queramos tener.
  2. Ganar con primas de riesgo. Un hábito muy común de los inversores es plantearse el invertir con primas de riesgo. Al aumentarse el riesgo, la probabilidad de que encontremos mayores rentabilidades también serán altas. No obstante, esto no siempre sucede así, y deberemos estar muy seguro de las prácticas que vayamos a realizar.
  3. Acostumbrarse a invertir. Nadie dijo que invertir sea una tarea sencilla, de hecho no lo es. Tenemos que diferenciar el acto de invertir y de apostar o especular. Estos últimos conceptos hacen referencia a cuando invertimos dinero a muy corto plazo pero no sabemos su paradero o lo que será de él. Por el contrario, invertir implica conocer en qué vamos a dejar depositado nuestro dinero y estar seguros que lo que suceda con él será culpa nuestra y no por puras reglas del azar.
  4. Practica tu estrategia. Deberemos tener muy claro cuál es nuestra estrategia: ponerla en práctica nos determinará si vamos bien o no. Por otro lado, si no nos va bien, podemos decidir si seguir usando esa estrategia o cambiar a otra que nos vaya mejor y que no nos haga perder (tiempo o dinero).
  5. Diversifica el riesgo. Otro de los hábitos más comunes de los inversores es que diversifican el riesgo de la inversión para asegurarse cierta rentabilidad. Invertir todo en un solo producto es muy arriesgado: podremos llegar a perder en vez de ganar si no sale como teníamos previsto. Por ello, en nuestra estrategia como inversores debemos incluir ciertos productos de diversa índole, así como destinos.
  6. Aprender de los errores. ¿Te has equivocado? No pasa nada. Ya se sabe: de los errores se aprenden. Hay que saber gestionar aquellas cosas que no nos salen bien para aprender de ellas, y rectificar la próxima vez que no nos salga tan bien.
  7. Tu alma más letal: la paciencia. ¡ATENTO! Impaciente e inversor no suelen ir muy unidos de la mano. Si sueles ser una persona que quieres los resultados al momento y en cantidad, te podemos decir que siendo inversor no te va a ir muy bien. Lo peor de las inversiones es que los beneficios que obtendremos serán a largo plazo, y tampoco es que se gane mucho (también dependerá de cuánto se invierta, todo sea dicho).
  8. Estar preparado. Otra de las características de los inversores es estar preparado, en el sentido más amplio. Tanto de forma económica, como de conocimientos. No se puede operar en el mercado si no contamos con un suficiente margen de maniobra que nos avale. Por otro lado, también es importante que contemos con unos amplios conocimientos sobre la materia: saber en qué estamos invirtiendo y conociendo los riesgos que asumimos.

Estas son algunas de las características y hábitos que debe cumplir un inversor si quieres tener éxito en sus finanzas. Aunque puedan parecer cosas sencillas, debemos tener presentes siempre todos estos puntos en todo momento para no caer en errores que nos generen demasiadas pérdidas.