El interés de demora es el que se aplica como penalización cuando el deudor incumple las obligaciones de pago. El importe del interés de demora siempre debe figurar en el contrato en el cual se han fijado las condiciones del préstamo o crédito con el banco.

Podemos exigir los intereses de demora de las facturas impagadas cuando se cumplan los vencimientos del pago de la deuda que se le han exigido a quién posee la obligación de abonar la factura.

Cómo calcular el interés de demora

Supongamos que pagamos una cuota mensual de 700 euros de hipoteca, hemos tenido este mes la cuenta a cero y por tanto no se ha podido hacer frente al pago, y esta situación se ha alargado durante 15 días. En nuestro contrato se estipula que en caso de retraso en el pago, se aplicará el tipo de interés vigente en este momento más 4 puntos, y además, una comisión por reclamación de la deuda de 25 euros. En este caso el interés de demora sería del 7%. La fórmula de cálculo es la siguiente:

Interés de demora= 700×0,7×15/365= 2,01 euros

A estos habría que sumar los 25 euros de la comisión por reclamación de la deuda, por tanto el total ascendería a 27,01 euros.

Cómo calcular los intereses de demora en las facturas impagadas