El significado de fluctuación es el acto y las consecuencias de fluctuar. En concreto, este verbo se refiere a la oscilación de valores, ya sea incremento o reducción de forma alternada. El concepto fluctuación presenta diferentes acepciones.

Qué es la fluctuación

En el ámbito de las finanzas hace referencia a la pérdida monetaria que se origina ante la disminución de una cantidad concreta de mercancías o por la actualización del stock. Recoge la diferencia entre lo que muestran los libros de inventarios y la existencia real de los bienes.

La merma será la pérdida concreta y material de los artículos, mientras que la fluctuación está asociada a la pérdida monetaria a consecuencia de dicha variación. La fluctuación pretende mostrar en dinero la diferencia entre lo que hay y aquello que se debería tener según lo recogido en los inventarios.

Se desarrolla una fluctuación cuando su medición da como resultado una evolución permanente, tanto a la baja como al alza, y siempre con una cierta inestabilidad. Por lo general, estos cambios tienen lugar a causa de situaciones externas o a consecuencia de la acción de la oferta y la demanda.

Las fluctuaciones económicas acarrean una serie de pérdidas y ganancias para los integrantes del mapa económico, protagonizados por modificaciones constantes en el precio o valor de los bienes, servicios o mercancías.

Tipos de fluctuación

Hay que diferenciar entre dos clases de fluctuaciones:

  • Fluctuación regular o cíclica:  hace referencia a diferentes periodos de crecimiento o decrecimiento que se van produciendo en el tiempo respetando un patrón.
  • Fluctuación irregular: no obedece a cambios previsibles, y se producen a causa de diferentes efectos externos.

Los cambios en el mercado de divisas también se denominan como fluctuaciones. En este sentido, el término fluctuaciones permite nombrar los cambios en el valor de una moneda en relación con otra. Esta fluctuación dependerá de los bancos centrales, de las acciones políticas y de la situación del comercio internacional.