El principio de importancia relativa o materialidad es una de las reglas más importantes establecidas en contabilidad que sirve para determinar si es preciso o no aplicar algunos de los principios de contabilidad reflejados en los Principios de Contabilidad Generalmente Aceptados.

Así, el concepto de principio de importancia relativa no interviene en las cuentas anuales de la empresa pero posee un margen de error por el que puede haber una pequeña desviación en lo relacionado a los datos proporcionados. Es decir, si bien los datos deben ser fiables y verídicos, no es precioso que sean ajustados en el 100% de su totalidad.

Por otra parte, el objetivo del principio de importancia relativa es el de definir si las partidas y los resultados de un mismo periodo contable tienen la importancia suficiente como para alterar (o no) la imagen de la empresa. De esta forma, se garantiza que los estados financieros de la empresa reflejarán exclusivamente aquello que tiene una trascendencia económica mucho mayor.