La definición de co-branding es la unión de marcas, sobre todo dos, con el ánimo de potenciar el valor y rentabilidad de ambas. Este tipo de acuerdos se hicieron muy populares en los años 90, estando nuevamente de actualidad. Uno de los objetivos es la asociación win-to-win, en donde las dos partes implicadas resulten beneficiadas.

En el caso de la marca anfitriona, el beneficio que consigue es el prestigio o la calidad que le proporciona la segunda firma. Mientras tanto, esta última gana en penetración de mercado y en acceso a mercados en los que por lo general no suele trabajar.

Cuando haya dos firmas que participen en el co-branding deben tener claro qué mensaje deben transmitir en la campaña conjunta. Cada vez son más comunes los acuerdos cobranding en marketing. Debido a que las empresas ven con buenos ojos estas alianzas estratégicas.

Tipos de co-branding

Antes de establecer una estrategia de co-branding es preciso que conozcas las distintas clases que existen:

  • Co-branding de competencias complementarias: es cuando dos marcas distintas se vinculan para promocionar un artículo en el que participan las dos firmas y que sirven como complementarios para ofrecer el mejor servicio posible a los clientes. Uno de los ejemplos de cobranding en este sentido es el acuerdo sellado entre Nike y Apple, cuando crearon un dispositivo para iPhone e iPod para deportistas.
  • Co-branding de conocimiento: este método consiste en compartir información de tus usuarios a empresas que aporten artículos totalmente distintos, y que apliquen al nuevo segmento de mercado al que deseas enfocarte. De esta forma las marcas disponen de una información fiable y segura. Ejemplo: convenio entre una aerolínea y tarjeta de crédito.
  • Co-branding de ingredientes: las alianzas de marcas, en este sentido, se realizan para fabricar un producto que genera un mayor valor. Suelen ser artículos de alimentación que se fusionan para lanzar un nuevo producto.
  • Co-branding de promoción de valores: las marcas participantes en el acuerdo buscan destacar los valores de ambas, a través de halagos mutuos. Consiguen que la otra empresa disponga de una mejor imagen corporativa, ya que se potencia lo mejor de cada una de las partes.

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