El fondo mutuo cerrado es aquel fondo mutuo que define desde el principio el número de acciones que va a emitir a los inversores. Una vez que se han vendido todas las acciones, un inversor que quiera invertir en un fondo cerrado sólo podrá hacerlo si compra acciones a otro inversor. Las acciones de los fondos cerrados se intercambian en los mercados bursátiles más importantes y por lo tanto se venden bajo par si los vendedores exceden a los compradores o sobre par si la demanda supera la oferta.