¿Cómo operar con warrants?
Hace ya muchos años que los warrants anda entre los inversores mostrándose como un derivado financiero más en el que poder confiar e invertir nuestros ahorros. Si estás empezando a invertir, posiblemente te interese valorar si incluir en tu cartera este tipo de instrumento financiero. ¿Quieres conocer más acerca de los warrants y su funcionalidad? ¿Quieres tener nociones básicas de cómo se opera con ellos? Te lo contamos todo en el artículo de a continuación.

¿Qué es un warrant?

Empezando por lo básico, un warrant es un tipo de producto financiero en el que su poseedor obtiene rentabilidades dependiendo de lo que haga otro activo denominado activo subyacente. Esto se hace mediante la existencia de un derecho (no obligación) a venta o un derecho a compra que la persona que invierte adquiere y se ejerce al finalizar el tiempo establecido (fecha de vencimiento) a un determinado precio también fijado con antelación.

Por lo tanto, para que un warrant funcione debe existir un derecho a comprar (llamado warrant Call) y un derecho a vender (denominado warrant Put). El precio al que se establece el activo subyacente suele denominarse strike. El activo subyacente puede ser un índice bursátil, cambio de divisas, materias primas, petróleo, etc.

El precio del warrant recibe el nombre de prima y puede evolucionar a lo largo del tiempo, dando lugar a las operaciones que podemos hacer con estos warrants para obtener rentabilidad. De ello hablaremos más adelante.

¿Cómo funcionan los warrants?

Los warrants son emitidos por instituciones financieras o empresas emisoras de activo subyacente (por ejemplo warrants sobre acciones). Al tratarse de productos financieros derivados, son tratados en el mercado extrabursátil, es lo que se conoce como over the counter.

El precio de la transacción (strike) de compraventa del warrant y fecha de vencimiento ya vienen predeterminadas por la empresa emisora, si bien el titular de dicho derecho puede hacer con él otro tipo de operaciones. Para poder efectuar dichas operaciones deben existir, obviamente, inversores interesados en comprarlos y en vender dichos warrants.

Hay que tener en cuenta que a mayor es la fecha de vencimiento, mayor será la incertidumbre y también habrá mayores rentabilidades. Además, las fechas de vencimiento suelen ser superiores que en las opciones financieras. Por esta razón, los warrants se convierten en una inversión que ayuda a los inversores a cubrir su cartera aportando algo de riesgo.

¿Y qué operaciones podemos hacer con un warrants? Pues las siguientes:

  • Comprar un warrant Call
  • Vender un warrant Put

Esto es así debido a que la negociación del producto financiero se hace entre ambas partes. Te contamos a continuación cómo deberías operar (algunas pautas iniciales).

¿Cómo se opera con warrants?

Como puedes comprender (ya que sucede en todas inversiones) debemos invertir en aquello que nos reporte rentabilidad según haya tendencias alcistas o bajistas. Como te hemos comentado anteriormente, la negociación entre warrants es bilateral lo que provoca que solo podamos realizar dos tipos de operaciones: compra o venta de un tipo de warrant u otro.

La inversión en warrants se hace mediante apalancamiento. Es decir, no inviertes el 100% de la cantidad que deberías pagar, sino una cantidad más pequeña llamada prima. De esta forma, podemos obtener unos resultados parecidos a la inversión con acciones pero teniendo en cuenta el apalancamiento de inversión que estamos sufriendo.

Estas son las dos posibles opciones:

  • Si vemos tendencias ALCISTAS, lo ideal sería que apostásemos por un warrant Call al precio que estimemos oportuno. Obviamente, si la tendencia alcista se cumple, cuanto más crezca el precio más caro nos saldrá y menos rentabilidad obtendremos.
  • Por otro lado, para tendencias BAJISTAS sería conveniente fijarnos en un warrant Put según el precio que estimemos que es mejor, antes de que continúe bajando más y no lleguemos a aprovechar.