Tasa de cambio

Entre las variables macroeconómicas se encuentra el tipo de cambio. Éste mide la relación entre dos monedas. Esta relación puede ser fija o variable.

El tipo de cambio, junto al tipo de interés, son las únicas variables que un país o conjunto de estados pueden decidir. Dentro de la Unión Económica y Monetaria los tipos de de interés y los tipos de cambio se deciden desde el Banco Central Europeo. Estas políticas se utilizan para regular un cierto nivel de PIB, un nivel de inflación, un cierto nivel de tipo de cambio, o una tasa de desempleo.

El tipo de cambio también desempeña un papel fundamental en la decisión de devaluar o revaluar la moneda de una país. Por ello, vamos a ver el funcionamiento de los tipos de cambios y las consecuencias que tienes sus subidas o bajadas para la economía de un país.

¿Qué es y cómo funciona el tipo de cambio?

El tipo o tasa de cambio es el valor de una moneda en otra moneda diferente, es decir, el a cuánto equivale el precio de una moneda respecto a otro. Aunque pueda parecer complicado, esto es muy sencillo. Por ejemplo, el tipo de cambio nos dice a cuántos dólares equivale un euro. Si el tipo de cambio entre el euro y el dólar es 1,20, significará que 1€ será igual a 1,20 dólares. De esta forma, podemos saber cuál es el precio de una moneda en relación a otras y saber cuánto valen los productos en otros sistemas monetarios.

La tasa de cambio es fundamental para establecer relaciones comerciales internacionales entre países con diferentes sistemas monetarios. Por ejemplo, si una empresa española quiere comprar productos a una empresa estadounidense deberá acudir al mercado de divisas para poder pagar en dólares su compra. La proporción que ofrezca el mercado entre las dos monedas será el tipo de cambio. También es fundamental conocer el tipo de cambio cuando las personas viajamos a otros países con monedas diferentes y queremos cambiar dinero para poder poder pagar cualquier compra en el país.

Sistemas de tipo de cambio

Según la variación  de los tasas de cambio en una moneda, podemos encontrar diferentes sistemas de tipos de cambio:

  • Tipo de cambio fijo: en este sistema el gobierno de un país fija el tipo de cambio de forma rígida con respecto a otra moneda concreta. Para ello, el Banco Central de cada país, compra o vende moneda para conseguir el tipo de cambio deseado. Se realiza para intentar corregir algunas economías muy inestables, pero provoca la desconfianza de los inversores.
  • Tipo de cambio flexible: en este tipo de sistemas cambiarios, las tasas de cambio varían en función de la oferta y la demanda del mercado de divisas, por lo que fluctuarán en función de la demanda que exista sobre una divisa concreta.

En la actualidad casi todas las economías cuentas con tipos de cambio flexible, en los que es el mercado el que determina el precio de la moneda. Se habla de apreciación y depreciación, cuando el precio de la moneda sube o baja, respectivamente. En el euro, es el Banco Central Europeo en el encargado de controlar los tipos de cambios para el correcto funcionamiento de la moneda.

Debemos tener en cuenta que los tipos de cambio varían a diario. Sin embargo, no se informa mucho de ello a no ser que se produzcan cambios importantes de forma continuada. Es normal que se produzcan variaciones en los tipos de cambio, las cuales son normales y ayudan al control de los ciclos económicos, pero las más destacadas suelen ser consecuencia de algunos cambios en la economía de una zona concreta.