Los nuevos agentes del sector bancario

El sector bancario ha sido uno de los más odiados durante años. Con el paso de la crisis en 2008 y el rescate a entidades como Bankia, los jóvenes han buscado alternativas a estas multinacionales que restringen en gran medida su libertad financiera. Buscan transparencia, autonomía, evitar comisiones… Y lo han encontrado en los Neobanks y los Challenger Bank; pero ¿qué son estos bancos?

Neobank y Challenger bank, ¿son lo mismo?

Realmente no, un Neobank no es realmente un banco, sino que depende de una entidad financiera. Sin embargo, sí que elimina comisiones, permite extraer dinero de cualquier cajero, facilita y acorta el proceso de creación de cuenta. Y todo a través de tu dispositivo móvil, ya que funciona a través de una app muy intuitiva.

Por su parte, el Challenger Bank no es dependiente de terceros. Tiene licencia de entidad bancaria y son 100% digitales, lo que viene siendo una banca online. Su capacidad de eliminar comisiones, gastos de transferencias, retirada de dinero en cualquier cajero, etc, viene de su carencia de sedes físicas. Sin sucursales, estos bancos han encontrado una capacidad de renunciar a gastos que incurre en un mejor servicio al usuario con costes (si los tiene) mucho más bajos que los de un banco tradicional.

Algunas marcas de éxito

Estas son algunas de las marcas que triunfan en el mercado actualmente:

  • N26. Es un banco alemán con sede en Berlín con licencia bancaria europea que ofrece sus servicios en 17 países de la Eurozona.
  • Qonto. Qonto nació en 2016 con el objetivo de facilitar a empresas, autónomos y startups, la apertura de cuentas profesionales, con las que de forma digital, se pueden gestionar transferencias, domiciliaciones, o pagos
  • Revolut. La británica Revolut se lanzó en julio de 2015, y ya son 350 empleados repartidos fundamentalmente por sus centros de Inglaterra, Rusia y Polonia.

Ventajas y desventajas del Neobank

Como todo, aunque la banca tradicional gane por goleada en cuanto a inconvenientes, no deja de ser una empresa con limitaciones. Pasamos a nombrar las más relevantes:

Ventajas del Neobank

Entre las ventajas del neobank, que son muchas, destacamos las siguientes:

  • Servicios financieros similares. Sus funciones son prácticamente las mismas que las de un banco normal (en el caso de los challenger banks, las mismas). Además, lejos de papeles y productos financieros complementarios que desconocemos que nos meten con calzador, son rápidos, transparentes y más baratos.
  • Diferentes divisas. No importa el país al que viajes, el dinero que extraigas del cajero será sin comisiones (o con unas mucho menos costosas que las que estamos acostumbrados a sufrir). Incluso las transferencias internacionales son más baratas.
  • Permiten abrir cuenta en otro país. Ideal para los viajeros habituales por placer o trabajo. Además de la rapidez del proceso de apertura de una cuenta (apenas unos minutos).
  • 100% digitales. Qué mejor producto para un público nativo digital que una cuenta bancaria con gestiones 100% digitales.
  • Operan con criptomonedas. Permiten comprar y manejar criptomonedas, cosa que no tienen nuestros bancos de toda la vida.

Desventajas del Neobank

La diferencia, en cuanto a desventajas, en comparación con la banca tradicional, es abrumadora:

  • Desconfianza. Para muchos, el hecho de no existir una oficina física a la que poder reclamar, es definitivamente una razón de peso para desconfiar del negocio. Esto pasa principalmente con las generaciones más mayores, acostumbradas a la banca tradicional.
  • Desconocimiento. Uno de los principales impedimentos con el que tienen que hacer frente, teniéndose que abrir paso a codazos. Es necesario educar al cliente, para que éste consiga cambiar su mentalidad: pasar del banco tradicional a uno digital. Va de la mano de la primera: un usuario que está aprendiendo a utilizar las herramientas del mundo digital aún desconfía de ellas.

El futuro de la banca en peligro

Con las fintech creciendo a un ritmo de vértigo, la banca tradicional haciendo EREs y reduciendo sus sucursales y los nuevos públicos (Millennial y Generación Z) que buscan una experiencia de usuario rápida, simple y digital, se auguran malos tiempos para el banco de toda la vida.

La introducción de apps enfocadas a dotar de herramientas digitales a los clientes apenas se acercan al potencial de los nuevos neobanks, que permiten muchas funciones que maximizan la autonomía financiera de sus usuarios. Es pretérito decir, como muchos han dicho ya, que el futuro será digital o no será.

Es hora de que los bancos se actualicen o acepten su lenta desaparición.