El término de superávit primario es la diferencia entre los gastos que tiene un Estado y los ingresos obtenidos por la recaudación de sus impuestos. Si estos gastos son mayores que los ingresos (en el que no se deben incluir los pagos de intereses de deuda pública tendremos superávit primario; en caso que sean menores tendremos déficit primario.

Diferencia entre el superávit primario y el superávit fiscal

Esta cantidad puede ser controlada por el gobierno en la forma en que maneja su política fiscal (modificando así su nivel de gastos y de impuestos). Es importante no confundir el concepto de superávit primario con el de superávit fiscal, que es el concepto en el que se incluyen el pago de los intereses de la deuda (ya que estamos hablando de una obligación contraída con anterioridad, y no el presente o modificable como lo es la política fiscal).

¿Por qué hallar el superávit primario?

La ventaja de calcular estos resultados (tanto superávit primario como déficit primario) son para saber los recursos que se están generando en un país. La sostenibilidad de la deuda pública se puede saldar con superávit primario, que ayudará a pagar los intereses de la deuda que el gobierno tiene.

Ejemplo para calcular el superávit primario

Para entender esto vamos a explicarlo a través de un simple ejemplo:

Imaginemos que un país recauda ingresos por valor de 1 000 000€ a través de sus impuestos, y tiene unos gastos de 900 000€ (pago a funcionarios de 500 000 y 400 000€ por sus políticas: acciones que debe llevar a cabo para alcanzar los objetivos planteados).

Según este ejemplo, tendremos un superávit primario de 100 000€ (resultado de 1 000 000€ – 900 000€). Estos 100 000€ podrá utilizarlos para poderlos invertir de nuevo o ahorrarlos.

Si por el contrario hubiese tenido unos gastos de 1100 000€ hubiese un déficit primario de 100 000€ y tendría que endeudarse para suplir dicha deuda que tiene contraída. Esta situación debería de esquivarse, pues suele ser molesto tener que endeudarse para poder pagar aquello que se debe.