Un monopolio comercial en términos de economía hace referencia a aquella situación de mercado en la que solamente existe una organización, entidad o empresa que ejerce un control sobre el comercio de un espacio geográfico determinado. Por tanto, por el concepto de monopolio comercial entendemos una comercialización en la que no existe ningún tipo de competencia debido al control que es ejercido por una única personalidad, al estar vetada la relación comercial con terceros.

Uno de los ejemplos de monopolio comercial más relevantes en nuestra historia es el que se produjo en América en manos de la Corona Española, en sus deseos de abastecer y controlar el suministro de mercancías y materias primas de esta región. Todo ello dirigido por la Casa de la Contratación de Sevilla.

5 características del monopolio comercial

Las principales características del monopolio comercial son las siguientes que mostramos a continuación. Todos y cada uno de estos casos son perfectamente reconocibles en el monopolio comercial español y el periodo que comprende.

  • Las especulaciones: están a la orden del día en un mercado bajo estas características. Por este motivo el flujo de producción y el flujo de venta dependerá siempre del país o institución monopolizador.
  • Las ventas restringidas, y el precio de cada producto siempre dependerá de la entidad que rige dicho monopolio comercial.
  • No hay espacio para la negociación, y esta es la principal diferencia con respecto al monopolio bilateral, ya que en estos casos el monopolio comercial es quien tiene la decisión final del precio de cada producto o servicio, mientras que en el caso del bilateral el precio de cada producto o servicio será fijado por quien tenga mayor grado de dependencia.
  • Mayor bienestar económico para los recaudadores del monopolio y mayor pobreza el consumidor debido a que no dispone de una gran oferta, por ello, dicho consumidor acaba sufriendo las consecuencias de la inexistencia de competencia en el mercado.
  • La entidad que controla el monopolio cuenta con la presencia de mandatarios y subcontratas para el ejercicio de su actividad, de tal forma que sean estos quienes puedan encargarse de la comercialización del producto a pie de mercado, gozando así de una situación privilegiada.