Las finanzas corporativas son un tipo de finanzas que trata de analizar y estudiar las variables empresariales que intentan maximizar el valor de un accionista. Las finanzas corporativas tiene en cuenta la valoración de los activos, así como aquellas decisiones que se deben tomar para que la empresa cumpla con su desarrollo de forma satisfactoria.

Entre las decisiones de inversión que tiene en cuenta, destacamos: retribución de dividendos; financiación propia/ajena; nivel de liquidez; eficiencia de flujos de caja; nivel de endeudamiento y apalancamiento; etc.

¿Qué actividades son de las finanzas corporativas?

Es importante que recalquemos las actividades que identifican las finanzas corporativas. No solo se tienen en cuenta este área de la empresa, sino también se valoran otros aspectos como los planes de expansión internacional o las adquisiciones empresariales de la competencia para la supervivencia de la empresa.

En definitiva, el conjunto de actividades que identifican las finanzas corporativas permite a las organizaciones tomar decisiones de carácter estratégico, en base a una actitud y una eficiencia (variables importantes y que la empresa tiene en cuenta con el paso del tiempo). Algunas de esas actividades son:

  • Las fusiones y adquisiciones que pueden afectar a la empresa.
  • El capital riesgo y los modelos de creación de valor y capital de inversión privado.
  • La estructura legal de la empresa.
  • La financiación de los proyectos en los que puede estar involucrada.
  • Estructura de capital, modelos financieros y modelos de inversión.
  • Los dividendos y descuento de dividendos de una empresa.
  • El coste de capital.
  • Nivel de endeudamiento y el apalancamiento financiero.
  • El desarrollo de banca de inversión.