El embargo comercial es una orden que el Gobierno realiza con el objetivo de limitar o prohibir la comercialización de determinados productos, servicios o la totalidad de ellos en un país o grupo de países.

El embargo comercial es causa de diferencias políticas existente entre los países, siendo una medida que se toma en represalia de países rivales. De esta forma, los países tienen la libertad de poder sancionar a los demás países a través del comercio.

El incumplimiento del embargo comercial podría conllevar una serie de sanciones a los países que infrinjan la norma establecida.

¿Qué objetivo tiene el embargo comercial?

El principal objetivo, tal y como se ha indicado, es poder hacer efectiva medidas políticas, sobre todo en contraposición de otros países.

No obstante, también puede ser utilizado como medida política contra algunos países que vulneren los derechos humanos. Es decir, se tomaría como una especie de castigo por el incumplimiento, obligando a que se tomen las medidas oportunas conforme los tratados internacionales.

¿A quién afecta el embargo comercial?

El alcance de estas limitaciones depende del país que es embargado. Dependiendo de las condiciones que se hayan establecido, el embargo tendrá ciertas limitaciones frente a otras.

No es lo mismo una imposición de aranceles a un determinado bien (que podrá afecta a la industria de ese bien), que la violación de los Derechos Humanos, cuya represalia internacional puede ser mayor.

Como hemos comentado en el apartado anterior, que un país vulnere los tratados internacionales o Derechos Humanos hace que la gravedad de la sanción sea mayor, llegándose a limitar de forma genera los bienes y servicios que se comercializan entre los países.