Antes de poder hablar de este concepto, es importante que recordemos que significa el concepto de amortización contable, que no es más que la forma en la que se cuantifica la depreciación de un activo (por el paso del tiempo, obsolescencia o deterioro) para la contabilidad de una organización.

El método de amortización contable creciente tiene mucho que ver con el concepto de amortización contable: se deprecian los activos, asignando a cada año de vida útil un número correlativo que corresponda a la serie de números naturales de forma creciente.

Este método de amortización hace que se tengan cada vez cuotas de amortización cada vez mayores. De este modo, en los primeros años el activo se depreciará mediante un gasto de amortización mucho menor que los siguientes años, teniendo una tendencia creciente con el paso de los años.

Cálculo de la cuota de amortización creciente (y ejemplo)

Para poder entender mejor cómo se calcula la cuota de amortización es mejor que lo veamos con un ejemplo de cómo se hace, explicando, a su vez, la fórmula.

En primer lugar, deberemos considerar qué bien deberemos amortizar y si utilizaremos la amortización creciente. Cuando lo tengamos claro, deberemos de valorar en cuánto tiempo deberá estar amortizado y cuál es la cantidad a amortizar. La cuota de amortización se calcula:

Cuota amortización creciente (año x) = Valor adquirido/Suma digitos de años x dígito correspondiente al año

Pongamos un ejemplo: un coche a precio de 20 000€ se quiere amortizar en 3 años. El valor adquirido será 20000€; la suma de dígitos de años será 6 (1+2+3, si hubiesen sido 4 años el resultado sería 10=1+2+3+4); y, por último, el dígito del año correspondiente será en el que nos encontremos.

Las respectivas cuotas de amortización por año son:

  • Año 1: 20000/6 x 1 = 3333’33 €
  • Año 2: 20000/6 x 2 = 6666’66 €
  • Año 3: 20000/6 x 3 = 10000 €

Si sumamos lo respectivo a cada año obtendremos la cantidad de 20000€, que es la cantidad a amortizar y coste inicial del vehículo.