Asesoramiento financiero gratuitos

El asesoramiento financiero sirve como ayuda cuando en tu empresa no haya ningún experto en esta materia u, ocasionalmente, necesites a alguien para ello. Invertir en ciertos aspectos de la vida (como particular) o en proyectos y estrategias (pymes) se pueden ver frenados por la falta de disponibilidad de estas personas. Pero no todos puede permitirse el «lujo» de contratar cuando más lo necesiten a estas personas, aunque también es verdad que no siempre es necesario. El dinero es un factor decisivo a la hora de contratar o no un asesor. Pagarlo lo justo no siempre está al alcance de todos.

¿Existen asesores financieros gratis?

Puesto que el principal problema es el dinero a la hora de recibir asesoramiento, intentaremos abordar algunos consejos o aspectos en consideración para encontrar cierta ayuda de forma gratuita.

Como primer paso u opción podemos preguntar a asesores financieros de nuestro banco, aunque de manera discreta. Estos asesores nos recomendarán productos o servicios que ellos venden, por eso deberemos ser precavidos en la forma en que se lo contamos. Aunque hay que tener cuidado, ya que al ser entidades bancarias, nos darán consejos que mejor se adapten a la oferta que nos quieran hacer.

Es por ello que, tras evaluarlo, deberíamos acceder a ver a un asesor que trabaje de forma autónoma. Los que trabajan para una asesoría suelen llevarse comisión por cualquier consulta que vayamos a hacer. Si nuestra consulta es simple, podremos pedir ayuda a estos autónomos que seguro no tienen problema en solucionarlo de manera gratuita.

Otra opción sería la de apuntarse a un curso gratuito de asesoramiento financiero. En Internet existen multitud de cursos gratuitos, al igual que los hay de materia financiera. Seleccionar alguno para poder adquirir los conceptos básicos puede ser una salida viable. Lo único que nos llevará será tiempo.

Formas de asesorarse en aspectos financieros

El asesoramiento gratuito puede ser una buena opción para adquirir los conocimientos financieros que necesitamos. Como ya hemos visto, existen muchas alternativas para lograr esto, aunque no quita que pagando a un asesor financiero sea mejor o peor.

La alternativa que suelen usar muchas personas es la de buscar en Internet cursos de formación sobre aspectos financieros. Estos cursos te dan nociones básicas sobre finanzas. Además, algunos de ellos pueden ser gratuitos, por lo que puede ser una buena opción si el asesoramiento que requerimos no es tan complejo.

Por otro lado, si deseamos inclinarnos por que estas personas nos asesoren sobre aspectos más concretos, que nos creen una estrategia o vigilen nuestras cuentas, deberemos elegir a profesionales financieros pagando por ello. Un buen trato financiero, obviamente, hay que pagarlo. En este sentido encontramos dos figuras: el asesor autónomo y la asesoría.

La asesoría está compuesta por un grupo de asesores financieros, económicos y contables en el que asesoran de la mejor forma posible sobre diferentes aspectos empresariales. La asesoría asegura la confidencialidad de los datos que ofrezcas, así como un servicio de experiencia y formación por sus integrantes de interesante mención. Suelen dar consejo tanto a particulares como a pymes.

En cuanto al asesor autónomo, el individuo cumple las mismas funciones que la asesoría aunque de forma independiente. La salvedad es que el asesor financiero autónomo es más difícil de encontrar, ya que a veces no cuentan con oficinas. Por otro lado, los asesores autónomos te piden una comisión mínima, mientras que la asesoría a veces suelen imponer altas comisiones para asegurarse obtener dinero para subsistir (el local, el prestigio, etc…).

De todas las formas de poder asesorarse financieramente, lo mejor que debemos hacer es informarnos antes de seleccionar un servicio u otro, sobre todo si tenemos desconocimiento.

Funciones del asesor financiero