Elegir asesor financiero

El asesoramiento financiero como intermediario es de suma importancia en una familia o empresa si necesitamos ayuda o consejo sobre tema de índole financiera. Estos individuos ayudan a las empresas o particulares a realizar transacciones, crear estrategias para lograr sus objetivos o asegurarnos la rentabilidad que hayamos planteado.

Obviamente, esto no lo hacen gratis, pues se suelen llevar un porcentaje o comisión o reciben un ingreso por el asesoramiento que realizan. Contratar un asesor financiero correctamente es conveniente para evitar despilfarrar el dinero. Hoy, te contaremos algunas claves para poder elegir el mejor asesor posible. Si quieres escoger de manera eficiente aquella persona que te ayude en tus estrategias de inversión, continúa leyendo.

Claves para escoger el mejor asesor financiero

Si estás pensando en contar con los servicios de un asesor, deberás tener en cuenta estos aspectos a la hora de contratarlo:

  • Los mejores asesores financieros están registrados como EAFI (Empresas de Asesoramiento Financiero) en la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Estar ingresado en dicha comunidad o tener certificados oficiales que acrediten el cargo que van a ejercer supone un plus a la hora de ser elegido como candidato.
  • Buscar referencias de nuestro asesor también es importante. Saber con qué clientes ha trabajado, cómo lo ha hecho, junto a quién, qué cargo ejerció, en qué proyectos estuvo presente, etc. Buscar en Internet su nombre puede ayudarnos a encontrar dicha información de forma sencilla, o incluso buscándolo por LinkedIn. Su trayectoria pesa mucho a la hora de elegir uno u otro. Saber en los proyectos que ha tenido palabra, también.
  • Hacer una selección entre los posibles candidatos puede ser decisivo. Si tras haber buscado varios perfiles no nos decantamos por alguno, deberemos elegir uno entre todos para que pueda realizar el trabajo de forma correcta. Para ello podemos servirnos de entrevistas personales a dichos asesores y conocer de primera mano cómo se manejan o cómo actúan ante determinadas ocasiones.
  • La forma en que pagaremos a nuestro asesor es crucial a la hora de elegirlo. Hay algunos que no están de acuerdo en la forma que pagaremos y, si no hay otra opción, deberemos de descartarlo como posible asesor. Entre las formas más comunes encontramos los pagos fijos, determinados por ambas partes; los sueldos, que variarán dependiendo del mes en que nos encontremos, así como los objetivos que se alcancen; y, por último, mediante comisiones que dependerán de los objetivos que se vayan logrando y de la cartera disponible u cantidad obtenida por la empresa.
  • Comunicar de manera eficiente los resultados conseguidos y no conseguidos a los responsables directivos, así como de las diferentes áreas departamentales dentro de la empresa para que colaboren en conseguir conjuntamente lo planteado.
  • Debe ser flexible en cuanto a disponibilidad para nuestra empresa, confiable para no relevar ciertos aspectos técnicos o financieros de nuestra empresa en comparación con otra y, por último, estar orientado a la consecución de sus objetivos para plantearse metas y que las cumpla.
  • Tener habilidades administrativos. Esto involucra tanto actividades técnicas (como los programas de Office), como habilidad suficiente para responder a las necesidades de la organización en el puesto que desempeñe.
  • Comprender los desconocimientos financieros del resto de la organización. Si un asesor financiero comprende a la perfección algunos aspectos pero alguno de sus compañeros no, deberá ser comprensible con estos que no lo son y ayudar en todo lo posible para que no tenga dudas al respecto.
  • Saber trabajar en equipo para generar los oportunos objetivos y generación de beneficio conjunto que desea la organización. El respeto con sus compañeros también es importante: aceptar la diversidad de opiniones tanto intraorganizacional como personal es de suma importancia para que éste aspecto sea cumplido.
  • Tener vocación y entusiasmo por lo que hace, ya que si no pone empeño en el logro de sus objetivos, nunca serán alcanzados.

Funciones del asesor financiero