Tipos de riesgos financieros

El riesgo económico hace referencia a la incertidumbre producida en el rendimiento de la inversión debida a los cambios producidos en la situación económica del sector en el que opera. Así, a modo de ejemplo, dicho riesgo puede provenir de:

  • La política de gestión de la empresa.
  • La política de distribución de productos o servicios.
  • La aparición de nuevos competidores.
  • La alteración en los gustos de los consumidores.

Estos riesgos financieros pueden producir grandes pérdidas en un corto espacio de tiempo, debido por ejemplo, a la irrupción en el mercado de un producto más avanzado y barato que el de la empresa en cuestión, provocando grandes pérdidas en la empresa.

Medida de las posibles eventualidades que pueden afectar al resultado de explotación de una empresa, que hacen que no se pueda garantizar ese resultado a lo largo del tiempo.

¿Qué tipos de riesgos financieros existen?

Anteriormente, hemos hecho referencia a la entrada de nuevos productos que fueran competencia directa de nuestra empresa. Sin embargo, no es el único riesgo posible que poseen las organizaciones empresariales.

Los tipos de riesgos financieros más importantes a los que se enfrenta una empresa son:

  • Riesgo de liquidez: se entiende como el riesgo a que el deudor no puede hacer frente a las deudas que posee con su acreedor, a pesar de tener activos por valor suficiente. Es decir, que no es no tenga dinero, ya que posee locales o maquinaria por valor superior, sino que no dispone de dinero en efectivo para poder hacer frente a sus obligaciones.
    • Riesgo de liquidez de activos: es el riesgo de querer vender un activo y no poder hacerlo por no encontrar comprador, o tener que hacerlo a un precio muy inferior por necesidad.
    • Riesgo de liquidez de pasivos: cuando no se puede hacer frente a los pasivos que se poseen y, cuando se hace, es un precio inferior.
  • Riesgo operativo: consiste en todos los riesgos que provienen de los diferentes procesos de una organización, ya sean procesos humanos, de productos o informáticios, que puedan provocar la generación de pérdidas.  Por ejemplo, los fallos humanos, tecnológicos o factores externos a la empresa como robos o desastres naturales.
  • Riesgo de mercado: hace referencia al riesgo que existe en la pérdida de valor de un activo, o de la empresa en general, por los cambios o fluctuaciones que se producen continuamente en el mercado, como por ejemplo, los precios.
  • Riesgo crédito: tal y como su nombre indica, es el riesgo que se tiene al dar un crédito. Es decir, el riesgo que tiene un agente económico que presta dinero de que no se lo devuelvan en la fecha de vencimiento.

Como verás, son muchos los riesgos financieros a los que constantemente se enfrentan las empresas en su día a día. Podemos ver que puedes provenir tanto desde el punto de vista interno, como desde el exterior de la empresa. Algunos de estos riesgos pueden suponer un grave perjuicio económico para la empresa, por lo que es fundamental siempre adelantarse a lo que pueda ocurrir para minimizar el impacto que pueda tener en el futuro.