El expediente de regulación de empleo, conocido comúnmente como un ERE es un proceso de carácter administrativo y laboral a través del cual una empresa consigue la autorización legal para despedir a sus trabajadores.
Además, la solicitud de un ERE puede ser demandada tanto por el empresario o la empresa en sí como por los representantes de los trabajos. Por norma general, a la hora de efectuar los despidos se da siempre prioridad a la permanencia de los trabajadores y la indemnización por el ERE se prorratea según los días del servicio del trabajador.
¿Cuáles son las etapas de un ERE?
Para desarrollar el procedimiento de un ERE, toda empresa tendrá que demostrar previamente una serie de problemas a nivel económico, técnico, organizativo o de producción para obtener su aprobación, siempre y cuando sean respetados los derechos de los empleados regulados mediante el Estatuto de los Trabajadores. De este modo, las etapas de un ERE más importantes son las siguientes:
- El periodo de consultas
- La tramitación del procedimiento
- La autorización administrativa
- La resolución administrativa
Una vez que se da por concluida la resolución administrativa a través del Ministerio de Empleo la empresa procederá con el ERE que normalmente tendrá que producirse a los 90 días después de obtener la resolución. Normalmente, las causas más importantes de un ERE se basan en el conocido despido colectivo de los trabajadores y en función del tamaño de la plantilla afectará de este modo a los trabajadores:
- 10 empleados para las empresas con menos de 100 empleados
- 30 empleados en empresas con 300 o más empleados
- El 10% de los empleados en una empresa que cuente entre 100 y 300 empleados
Por último, es importante saber que si el ERE se produce con carácter temporal, recibe el nombre de ERTE.
