Robert Shapiro, asesor del Fondo Monetario Internacional, ha declarado que si la crisis económica no se resuelve de manera creíble, dentro de algunas semanas podríamos sufrir un duro golpe sobre la deuda soberana que terminaría desencadenando el colapso de todo el sistema bancario europeo.
Shapiro ha sido enfático en aclarar que no se trata de un problema en algún banco belga o de otro país europeo, sino de un problema que afectará a los principales bancos de Alemania, Francia y de todo el mundo. Este problema generaría una reacción en cadena que terminaría afectando a todo el sistema financiero mundial.
Lógicamente, estas declaraciones podrían desatar una ola de pánico, sobre todo cuando diversos economistas aseguran que esta crisis será más intensa que la que afectó el mundo durante el 2008 y que podría ser considerada como la peor de la historia de la humanidad.
Ante esto, lo más razonable es actuar con prudencia y realizar un manejo responsable y muy austero de la economía doméstica. Si es probable que el mundo entre en una enorme crisis, debemos prepararnos para ello.
